Oración enviada por xanitu hace 6 años
Dios Eterno. Acoge, oh Eterno los sentimientos
que mi boca expresa, y enséñame tus leyes.
Ylahiah, Si me has elegido a mi como instrumento de tu justicia,
mantenme dentro de tu luz, no permitas que mis sentimientos se
desborden impeliéndome a tomarme la justicia por mi mano. Guíame,
Señor, hacia las escuelas del saber, donde pueda instruirme sobre tus
leyes y tomar conciencia de la organización del cosmos. Haz que las
empresas en las que triunfe sean aquellas que inspira tu designio. Y
estando tu voluntad en juego, haz que sea ese héroe mediante cuyo
comportamiento todo el universo da un magistral paso adelante.
Ylahiah exhorta:
Necesito hombres que sepan cortar las amarras de lo podrido, que
tengan el valor de romper una ley que ha dejado de ser útil. Te he dado
sentimientos fuertes y los he atado a un pasado ancestral, para que
puedas inspirarte en los héroes antiguos, y encontrar en la Historia la
motivación para poner coto a un presente sin esperanza. Quiero que la
fe en ti mismo te lleve al deseo de gloria, y que seas así el paladín de
un mundo sin piedad para lo corrupto. Yo pondré en ti los argumentos
que justificarán tu acción, Yo te haré ganar los procesos, y si de tu parte
pones la lucha, Yo te daré la victoria. Pero no te excedas, peregrino, en
tus atributos, porque un pesado karma caería sobre ti, y necesitarías
varias encarnaciones para poderlo liquidar, reviviendo en tu carne viva
los horrores de tu pasado.
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