Oración enviada por xanitutinax hace 4 años
Heme aquí, oh mi Dios, a tus pies! derrotado y afigido.
Yo no merezco Tu Misericordia, pero: ¡Oh, mi Redentor,
la sangre que has derramado por mí me anima y me
obliga a esperar por ella.
Cuántas veces te he ofendido, me arrepentí, y sin
embargo, de nuevo he caído en el mismo pecado.
¡Oh, mi Dios, me gustaría cambiar, y para serte fiel,
voy a poner toda mi confianza en Ti.
Cada vez que me sienta tentado, voy a recurrir al instante a Ti.
Hasta ahora, he confiado en mis propias promesas y
resoluciones y he descuidado recurrir a Ti en mis tentaciones.
Esta ha sido la causa de mis repetidos fracasos.
Todopoderoso y Misericordioso Dios, gracias por oír mi oración;
y liberar mi corazón de las tentaciones de los malos pensamientos.
Que mi cuerpo pueda llegar a ser un hogar
digno para Tu Espíritu Santo.
Amén
Enviar oración a la nubeEnvia esta oración a la nube para que sea escuchada
No se ha encontrado imágenes con esta oración a Dios Padre.