Oración enviada por xanitutinax hace 5 años
¿Sabéis porqué la alegre golondrina
audaz remonta el vuelo
y se pierde por las anchas bóvedas
que desde aquí estáis viendo?
¿Sabéis porqué? ¿Creéis que es el acaso
el que le da el deseo?
¡Oh! jamás: es que el ave como el hombre
ver quiere el Cielo.
¿Sabéis porqué. cuando la negra noche
rasga su denso velo,
yergue su frente la modesta viola
del sol al primer beso?
Creéis también que es el acaso? ¡oh locos!
no lo creáis, no es eso,
es que la planta como el hombre ansía
ver cerca el Cielo.
¿Sabéis porqué cuando las aguas corren
siendo arroyo primero,
río después, que a la mar hace entrega
de caudal tan inmenso,
murmuran dulcemente como alegres
del rápido descenso?
Porque saben que al unirse con las aguas
que a Dios sirven de espejo,
a los rayos del sol que nos abrasan
han de ser sin remedio,
nubes que oscureciendo este planeta
besarán casi el Cielo.
Hay en lo creado anhelo
de ver lo que oculta Dios,
que todo, todo va en pos
del reino eterno del Cíelo.
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